Una vez celebradas las elecciones generales, los partidos políticos que van a conformar el futuro arco parlamentario tienen una doble responsabilidad. En primer lugar, la tarea de formar un gobierno estable que consolide la recuperación de España, no sólo desde el punto de vista económico sino también del denominado “estado del bienestar”, una recuperación centrada en las personas. La segunda responsabilidad, no menos importante, es el cumplimiento de las propuestas y promesas planteadas en el programa electoral del partido o partidos que conformen el ejecutivo, máxime en un momento político en el que la credibilidad de los mismos está, cuanto menos, cuestionada.
Del análisis de los programas electorales de los cuatro partidos más votados (PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos) se desprende que una buena parte de las propuestas van dirigidas a las personas mayores de 65 años, que representan casi una cuarta parte del electorado y que cada vez tienen una presencia más activa en nuestra sociedad.
La Asociación Gerontológica del Mediterráneo, una asociación de profesionales, sin ánimo de lucro, y que tiene como objetivos la promoción y el progreso de la Gerontología y la Geriatría desde el punto de vista científico, clínico y social, el desarrollo profesional de la asistencia sociosanitaria y la atención a las personas dependientes, el asesoramiento a instituciones públicas y privadas relacionadas con la atención a las personas mayores, la operatividad en el marco de la responsabilidad social y la promoción del diálogo entre saberes que contribuyan a mejorar la asistencia y la calidad de vida de las personas mayores, celebró el pasado mes de mayo una jornada, Gerontológica 2015, sobre “Políticas de Atención a las Personas Mayores”, con la participación de representantes y expertos de los Colegios Profesionales y del ámbito universitario, de los pensionistas y más de un centenar de asistentes.
Las conclusiones de esa jornada incluyeron la necesidad de políticas públicas que se adapten al perfil actual de las personas mayores, con más inquietudes culturales y mayores demandas; la adecuación del actual sistema de pensiones para garantizar los recursos para el futuro; la necesidad de una atención geriátrica especializada, tanto a nivel preventivo como asistencial; la consolidación de un sistema sociosanitario, integrando y coordinando los servicios sanitarios y sociales, garantizando la continuidad de cuidados; el papel de la enfermería en dicho sistema como “gestora de casos”, en especial en el ámbito comunitario; la promoción del envejecimiento activo; el uso racional de los medicamentos y la personalización de la medicación; la consideración del sector de atención a los mayores como estratégico; y la necesidad de una auditoria continuada de la eficacia, la eficiencia y la calidad del sistema, entre otras.
Muchas de estas propuestas están recogidas en los programas de los partidos con posibilidades de formar Gobierno. De hecho el partido más votado incluye expresamente en su programa el compromiso de establecer un modelo integral de atención sociosanitaria, con una estrategia nacional conjuntamente con las Comunidades Autónomas, así como la elaboración de guías de buenas prácticas de atención, la incorporación del geriatra en centros de salud y hospitales y la orientación de la red de oficinas de farmacia como dispositivo de proximidad para la atención del paciente crónico y dependiente y como elemento fundamental del nuevo espacio sociosanitario.
La coordinación de los servicios sociales y sanitarios, las políticas de envejecimiento activo, la estabilidad y garantía del sistema de pensiones, la accesibilidad en el transporte y a la sociedad digital o la atención a las personas en situación de dependencia son otros aspectos específicos que aparecen recogidos en los distintos programas electorales, si bien, evidentemente, las políticas generales de sanidad, servicios sociales, vivienda, energía, reformas fiscales o cohesión social van a tener una repercusión en la calidad de vida de toda la población.
Tras los necesarios pactos electorales que permitan la gobernabilidad de España, tanto los grupos políticos que se encuentren en la oposición como la propia ciudadanía tendremos la responsabilidad de ejercer el control del cumplimiento de los estos programas a lo largo de la próxima legislatura. Y la Asociación Gerontológica del Mediterráneo estará en esa tarea dispuesta a colaborar.
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